Control de los dos años

Hace tiempo que no visitabamos a la pediatra con los niños, desde que volvimos de nuestras mini vacaciones en Brasil, en agosto pasado, mis hijos no se han enfermado y han estado muy sanos, ya hasta creo que deberemos hacer un viajecito así una vez por año (ya quisiera!), pues parece que tanta humedad les reforzó las defensas, jeje.

Pero ya era tiempo de llevar a su control de los dos años a mi pequeño, al estar tan bien de salud no quise llevarlo en septiembre cuando le correspondía, para evitar cualquier tipo de contagio en la consulta, por lo que lo postergué hasta hoy.

La partida a la consulta fue bastante caótica, mi hijo no quería que le pusiera la ropa, hizo un berrinche de aquellos, con gritos y llanto mientras lo vestía luchando con él, no se imaginan lo que transpire al hacerlo, cuando al fin termine, que quedo llorando y pataleando en el suelo, mientras yo buscaba mi cartera y llaves del auto para salir. Cuando ya tenia todo listo, le digo: "nos vamos" y él, yo creo con cargo de conciencia de su pataleta, me tira los brazos y me dice "apa", se acurruca en mi hombro y bajamos al auto muy amigos.

Por supuesto, después de este comienzo, me imagine que la visita a la doctora no sería nada tranquila, ya me imagina un berrinche igual una vez le sacara la ropa y lo quisiera vestir en la consulta. Por lo que decidí ser precavida y lleve dos Frugelé (caramelos blandos) para entretenerlo si algo así sucedía.

Por suerte, y como siempre a ocurrido cuando vamos al doctor, todo fue normal, el feliz de ver a su pediatra, conversó y contestó (a su manera) todo lo que le preguntó la doctora, sobre todo cuando le preguntó por su hermana, jeje.

Nuestra pediatra comenzo su chequeo y encontró que tiene un desarrollo del lenguaje, cognitivo y social muy normal para su edad. En cuanto a su estatura, es bastante alto (percentil 75) para los dos años, su peso esta dentro del promedio, ahora si comparamos su peso y estatura, esta dentro del promedio pero muy bajo, así que me aconsejó cambiar la leche liquida descremada que toma, por una que sea semi-descremada.

Todo bien hasta que le comenté que encontraba que su prepucio estaba muy estrecho, a lo que al revisarlo, me dijo que sí, que mis sospechas eran ciertas y que sería mucho mejor derivarlo al Urólogo Infantil, pues hasta los dos años se podía esperar que estuviera estrecho, pero ya sobre esa edad no era normal. Por eso, la evaluación la debía hacer un profesional, por si necesitara cirugía.

Ya tenemos hora agendada para el próximo miércoles y sabremos que nos dice el doctor, si es necesaria la cirugía o no, ahora no se si quitarle los pañales, lo pensaba hacer este fin de semana, pero si requiere cirugía, ¿será conveniente hacerlo antes o después?.

A pesar de la preocupación de una posible cirugía, pues me imagino que sería con anestesia general, y tan solo acordarme de la angustia que sufrimos con la cirugía de mi hija, ya empiezo a ponerme nerviosa. El resto del control estuvo muy normal, mi hijo esta creciendo acorde a su edad y muy sanito.