17 de agosto de 2012

Los niños y la tecnología


Ayer leía un reportaje que hablaba de las nuevas niñeras electrónicas  - léase IPhone, IPad, Tablet, Wii, Smartphone, etc – y como se han transformado en los predilectos de los padres a la hora de entretener a sus hijos, desplazando así al televisor, ahora “viejo” aliado cuando necesitábamos distraer a nuestros peques.

Para mí este es un tema que me genera muchas contradicciones, porque así como creo que la tecnología nos ha cambiado la vida para bien en muchos ámbitos, siento que también nos ha hecho perder muchas cosas, como el contacto piel a piel con los amigos, porque ahora los vemos todos los días por Facebook y sabemos con quien, donde y como están; o esa cercanía de escuchar la voz del otro, porque ahora nos comunicamos por Whatsapp porque es gratis y las llamadas son caras, por ende sobran; o el sentir el olor de las hojas de un libro viejo, porque ahora lo leemos en la Tablet y hasta olvidamos la simple acción de escribir a mano porque ahora presionamos unas teclas.

Hasta hace un tiempo en mi IPhone tenía muchos juegos para la Mayor y le prestaba mi teléfono cuando viajábamos en auto o en esperas largas y aburridas, pero muy contadas veces cuando estábamos en casa, aún así siempre me estaba pidiendo el teléfono para jugar. Hace unos meses el Mediano aprendió a jugar también esos juegos, con una habilidad impactante, para sus escasos casi 3 años sabía desbloquear el IPhone, buscaba los juegos y se ponía a jugar sin ayuda, incluso con una facilidad aprendió a mover los iconos y cambiarlos de lugar.

Todo esto derivo en que el Mediano también pidiera a cada rato el teléfono para jugar, generando peleas entre él y la Mayor por los turnos de juego, por quien jugaba primero, por quien ganaba o quien perdía. Hasta que un día colmaron mi paciencia y les elimine todos los juegos, santo remedio, nunca más pidieron el teléfono. Ahora la única relación que tienen con el teléfono es para ver videos o en el caso de la Mayor para llamar al papá o sus abuelos, pues encontré necesario que aprendiera a hacerlo en caso de cualquier emergencia.

En cuanto al computador, la Mayor sabe elegir videos en YouTube y tan fácil como presionar el icono que lo tenemos en los marcadores, pero nada sabe de buscar paginas o juegos. Mis hijos tampoco tienen consola de juegos y tampoco tenemos en mente comprarles una muy luego, aunque yo feliz tendría una para mi, jeje. La verdad, encuentro que ven demasiada televisión al día, como para sumarles más horas jugando frente a ella.

Créanme que he recibido algunas críticas por esto como “que mis hijos se quedaran atrás en la modernidad, o que no sabrán de que hablan sus amigos, que no estarán en onda, o bien que después les costara más aprender a usar la tecnología, etc, etc”. Aun así y pensando que exageran bastante, prefiero mil veces ver a mis hijos inventando juegos y personajes, jugando a hacer una casa bajo la mesa, haciendo shows de canto y baile o bien jugando a la escondida en nuestro pequeño departamento.

No sé si estoy haciendo bien o mal, tampoco pretendo hacer o que hagan un juicio de valor sobre esto, al menos yo siento que mis hijos pierden su inocencia aprendiendo a manejar tanta tecnología, además tienen muchos años por delante para ocuparla y caminar con la cabeza gacha ensimismados leyendo la pantalla Smartphone como lo hacemos la mayoría de los habitantes de esta ciudad.

4 comentarios:

David Stoks dijo...

La verdad es que personalmente no estoy muy a favor de los aparatos electrónicos y los niños. Creo mucho más en las cosas sencillas, de materiales más naturales y con un objetivo más educativo. Creo que lo electrónico aleja a los niños (y a todos en general) de la realidad.

Mariela Guzmán dijo...

Creo que los niños deben ser seres integrales, capaces de descubrir todo lo que el mundo les entrega, parte de ésto es la tecnología y somos los padres los llamados a enseñárselas y a fijar los límites para que ésta sea parte de su vida y no se transforme en ella.
Jamás se me ha pasado por la mente quitarle a mis hijos algo por lo que pelean, sea este un juguete o algo tecnológico, porque mi deber es enseñarles a compartir y ser hermanables, solo así de adulto serán capaces de resolver problemas y enfrentarlos para encontrar una solución en conjunto.
En resumen lo que ven y juegan los niños es estos aparatos es lo que nosotros bajamos en las aplicaciones, en mi caso cuentos, libros de aprendizaje en inglés, etc

100% Mamá dijo...

David: Gracias por tu comentario, saludos!!

Mariela: Por supuesto que antes de quitarles algo porque pelean uno les enseña a compartir y a ser hermanables, es algo que uno esta dia a dia y hora tras hora enseñandoles, pero al decidir borrar de mi iphone los juegos y no prestarselos más es con el fin de no generar mas conflictos y el que quieran estar todo el dia jugando con el. Las aplicaciones o juegos como les digo yo eran puzzles, libros para pintar, juegos que reconozco que eran educativos, enseñaban letras numeros, orden, etc, pero creo que es mejor enseñarles eso con un libro de verdad y lapices o puzzles de verdad, saludos y gracias por comentar...

Bere dijo...

Creo que la tecnología no es algo que les podamos esconder, pero como dices, también hay que racionarlo. Está bien que aprendan algunas cosas, pero más importante es el juego, que corran, brinquen, griten... etc. Para ellos es muy natural usar los aparatos, nos ven todos los días usándolos, así que unos analfabetas de la tecnología no serán, te lo aseguro.
Cuando fueron los Reyes Magos, pensé en que le trajeran una pc para niños (de esas que son de juguete), pero luego me arrepentí. Ahora que entró al kinder, le pidieron una y anda fascinado (ya usaba un poco una viejita de mi papá).