Un año como Columnista

Como ven, nuevamente estoy de aniversario, pues hace un año comence a escribir mi columna para Revista Carrusel.

Todo comenzo con un mail que recibi dos semanas antes, en el cual una periodista de la revista me preguntaba si queria colaborar escribiendo para ellos. La verdad me sorprendio mucho el ofrecimiento, pues mi blog ni siquiera tenia un mes de vida, incluso llegue a pensar que lo que escribia podia no ser del perfil de los lectores de la revista.

Despues de conversar con mi marido y una amiga, decidi aceptar. Y aqui me tienen escribiendo dos veces al mes (algunas veces mas, otras menos, jeje) para la web de la revista. 

Gracias a todo el staff de la Revista en especial a Daniela Rossi por el apoyo y confianza. Tambien quiero agradecer a Barbara, que fue la que me contactó y aunque ya no esta en la Revista la recuerdo con un gran cariño. Así tambien saludar a los lectores de la revista, gracias por leer y comentar, un abrazo.

Bueno y para celebrar este día les dejo la primera publicación en mi columna de Revista Carrusel:

La Típica Frasecita

De todas las frases o consejos que te dan cuando estas embarazada, la que más detesto es: “uy, aprovecha de dormir ahora, porque cuando nazca tu bebé, no dormirás nada”, me carga!, y lo peor que te lo dicen con una seguridad absoluta. A mi me la dijeron varias veces, con mi primer embarazo y con el segundo, que es peor, como que no se dieran cuenta que una ya fue mamá y sabe algo al respecto.

Bueno, para las futuras mamás, les recomiendo que apenas les digan esa frase, ustedes no hagan caso, todos los bebés son distintos. En mi caso mi hija fue un ángel desde que nació, dormía todo el día y toda la noche, incluso la tenía que despertar para darle pecho, lo mejor era que dormía hasta cuando uno pasaba la aspiradora, nada de andar en puntitas de pies o hablando bajito, realmente fue exquisita.

Con mi hijo fue todo lo contrario. ¡ Uf!, creo que con mi marido no dormimos bien hasta que cumplió los 7 meses, cada 3 horas exactas pedía la pechuga, lloraba mucho y había que pasearlo en brazos casi toda la noche, incluso varias veces mi mamá, mi marido o yo dormimos con él sentados en el sillón, después dormía con nosotros en la cama, pues estaba toda la noche colgado a mi pechuga, de día cuando dormía su siesta tenía que estar todo en silencio en la casa (bueno eso aún sucede con sus siestas), fueron los 7 meses más agotadores de mi vida, o sea, dormía mal (si es que dormía), y si quería salir de la casa, le daba pecho y salía rapidísimo para volver a las 3 horas siguientes a realizar la misma rutina. 

Por suerte todo cambio cuando decidí, en favor de mi sanidad física y mental, dejar de amamantar y darle formula, claro que también ayudo el hecho que empezó a comer papillas. El cambio en mi vida fue total (así también para mi entorno; mi marido y mi madre). Empezó a dormir toda la noche de corrido y durante el día me dio un poco de independencia. Claro que como nada es perfecto, todo esto fue en desmedro de nuestros bolsillos, pues como mi hijo tiene APLV (alergia a la proteína de la leche de vaca), tengo que darle una formula especial, la cual es carísima.

Así que como pueden ver, todos los casos son distintos y no todos los bebés se comportan iguales. Ahora cada vez que escucho a alguna persona hacer un comentario así a una embarazada, la interrumpo y le digo que no es así. Total, para que angustiar a alguien antes de tiempo, si por más que duerman ahora no les va a servir de nada después, jeje.

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