29 de noviembre de 2010

Buscando un Jardín

En unas semanas más, mi hija termina una etapa de su vida: El Jardín, y el próximo año irá al colegio. Aún recuerdo cómo fue que decidimos que entrara al Jardín con solo 2 años recién cumplidos.
Con mi marido, teníamos la idea que no entraría al jardín, sino que iría directamente a Pre-Kinder. Como tengo la suerte de no trabajar, no era una prioridad el que fuera, pues yo la cuidaba y la llevaba todos los días a jugar al parque o con sus amiguitos del condominio, incluso en invierno, nos turnábamos con las otras mamás para que jugaran un día en cada casa, así que tenía una interacción diaria con otros niños.
Pero al año y medio, se puso super mala para comer, mala, mala, no comía casi nada, solo tomaba leche y yogurt, incluso tomando estimulador del apetito no comía. Como nada nos daba resultado y tratando de buscar alguna solución, pensamos que si iba al jardín y almorzaba allá, con otros niños, eso la estimularía a comer mejor.
Así que decisión tomada, salí inmediatamente al otro día a buscar jardín. Pensé que sería muy fácil, pero estaba muy equivocada. Fue una larga semana en la que recorrí cerca de 7 jardines, buscando el que fuera perfecto, más que mal, les dejaría en sus manos a mi tesorito durante todas las mañanas, 5 días a la semana.
Y me lleve varias sorpresas en el camino, en algunos tan solo con el recibimiento, me asustaron; otros con los baños sucios, o a los niños sirviéndoles cereales directamente en la mesa (ni siquiera en una servilleta o plato) como quien alimenta pollitos, en otros los de sala cuna mezclados con los del nivel jardín, ventanas en segundo piso sin mallas de protección, etc, etc.
Estuve toda una semana recorriendo establecimientos, hasta que llegué al jardín que esta mi hija ahora. Y tan solo al entrar me encanto, me atendió la directora, un amor, me dio un recorrido por todo el jardín, incluso fuimos al otro día para que mi marido lo conociera. Todo lo que yo esperaba de un jardín lo encontré ahí, lo mejor es que a los niños les preparaban el almuerzo, según una minuta mensual que enviaban a los padres, los baños estaban bien aseados y eso era muy importante para mí, pues mi hija sufría de reflujo urinario y tenia facilidad para las infecciones urinarias, así que había que tener cuidado con sus mudas. Un patio chiquitito, pero acogedor. Y unas educadoras muy amorosas.
No nos costó decidirnos por este jardín, a la semana siguiente, los primeros días de octubre, mi hija tuvo su primer día. Claro que como cualquier niño, lloró un poco los primeros días, pero a la semana ya le encantaba ir.
De eso, hace ya dos años, en los que aprendió a compartir, a ser más independiente, ir al baño solita, dejar la mamadera y tomar en vaso la leche, a comer frutas y vegetales, aprendió canciones y bailes, más sobre los números y las letras, a dibujar y pintar, a explorar y hacer amigos. Cada día lo disfrutó a concho, no hubo uno, en el que no quisiera ir al jardín.
Creo que no hay un jardín perfecto, pero este fue el jardín perfecto para mi hija, en el que la estimularon y respetaron sus tiempos y procesos, también le dieron cariño y afecto, y eso como mamá una lo valora y agradece.
La semana pasada, se celebró el día de la Educadora de Párvulos, va mi agradecimiento a todas las ejercen tan linda profesión, porque son un pilar fundamental en la formación de nuestros hijos. En especial a: Pauli, Marce, Pati y Quena, las educadoras del jardín de mi hija, mil gracias por la dedicación, paciencia y amor entregado, y sobre todo por ayudar a que mi hija sea una linda y mejor persona, las extrañaremos!

3 comentarios:

Marina dijo...

Yo estoy feliz con el colegio de mis hijos!!! Es fácil dejarlos cuando sabés que los cuidan y que los conocen cómo son. En fin, les deso mucha suerte en esta nueva etapa!!!

Claudia Corazón Feliz dijo...

El próximo año, cuando mi mostra cumpla 2 años y hable un poco, la llevaré mediodía al jardín. Así me servirá para descansar y ella aprenderá. Pero desde ya leo blogs del tema, para ver cómo les fue a las demás mamás.

Jazmín dijo...

Yo todavía no busco, pensaba dejarlo en el centro Gymboree a donde toma estimulación temprana, pero hay varios por casa y tienes razón debemos encontrar el que sea perfecto para ellos, lo más seguro es que a principios del próximo año empecemos a buscar, para que cuando cumpla 2 entre a la escuela, me emociona y me pone nerviosa. Saludos.