La Varicela o peste cristal, nos venía persiguiendo desde hace meses, hasta que al fin nos alcanzo, pillando primero al Mediano. El viernes le encontré unas pintas en la espalda, que en unas pocas horas se expandieron por brazos, piernas y su pancita.
Con el temor de que fuera peste conseguí una hora para el doctor ese mismo día en la tarde, y lamentablemente confirmamos nuestras sospechas, tenía varicela. Aunque según la doctora le agarro bien suave, pues no tuvo fiebre ni otros síntomas asociados a esta peste, salvo las pintas, ya convertidas en granos bien feos, que afortunadamente son bien pocos.
Lo malo es que la Varicela llego en la peor fecha y época del año, arruinando un sinfín de panoramas y eventos que teníamos programados para el fin de semana que paso y para los venideros.
El sábado reciente teníamos una reunión familiar muy esperada, la visita de mi prima desde Australia con sus dos hijitas (de 2,6 años y 6 años), hacia 4 años que no nos veíamos y les teníamos preparada una sorpresa a sus niñitas, que estuvimos a punto de suspender, o sea, que fome venir a Chile de vacaciones y terminar agarrándote una peste. Por suerte y muy amorosamente mi marido se ofreció a quedarse encerrado en nuestro depto con el Mediano y no ir a la reunión, a fin de no contagiar al resto de los niños. La reunión y sorpresa fue hermosa, aunque extrañando la presencia de mi Mediano y marido.
Lo que si hemos tenido que suspender es la fiesta de cumpleaños de la Mayor, que se celebraría este sábado, pues no tenemos la certeza que todas las pintas del Mediano hayan cicatrizado para esa fecha, y mientras no cicatricen todas, aun andará contagiando. La más triste, por supuesto fue mi hija, pues ya tenía todas sus invitaciones mandadas y estaba muy entusiasmada por su fiesta y que ahora deberá esperar hasta el próximo mes para celebrarla.
Lo que de verdad me preocupa mucho más que los eventos que teníamos, es que se haya contagiado el Menor, pues es el único de mis hijos que no está vacunado y podría darle muy fuerte, no quiero ni imaginar lo que va a sufrir mi pequeño si se llena de granos molestos. Por lo que tomamos la decisión de dejar al Mediano, por esta semana, en casa de mis padres, a fin de evitar el contagio con sus hermanos, pensado de que no los contagió antes. Lo que no sabremos hasta que aparezcan los síntomas, pues el periodo de incubación puede durar hasta 21 días. La precaución va más que nada por proteger al Menor.
Por supuesto, el más feliz con todo esto de la peste es el Mediano, que esta pasándolo de maravillas con estas mini vacaciones en casa de los abuelos y ni cuenta se ha dado de los granos que tiene en su cuerpo - por suerte no tiene en la cara, ni en la cabeza, porque vi unas fotos en internet que casi me morí - los que gracias a la vacuna y los remedios recetados no le han picado ni molestado y muchos ya están bien cicatrizados.
Veremos cómo nos va en los próximos días y semanas, si nos salvamos o por estos lados seguiremos “apestados”.
2 comentarios:
Pobrecín! a mi me dió grandota (4to medio) y casi me morí de la picazón. Ojalá se recupere rapidito!! y que no haya contagiado el pequeñin! muchos saludos!
Que lastima, espero que se recupere pronto y no lo pase muy mal...
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